Era el ascenso, la fiesta, lo que se llevaba buscando durante 4 años. Era el minuto 57 (mismo minuto en el que se abrió el marcador en el 3-0 al Lorca en el año 2004, ascendiendo el Pontevedra CF), cuando Jacobo bota una falta desde la banda izquierda. Entonces, apareció una camiseta verde con franja blanca. El paso hacia la implementación de números fijos que se asignaran a cada jugador en un equipo fue iniciado para la Copa Mundial de Fútbol de 1954 donde cada hombre en una selección nacional de 22 hombres debería llevar un número específico para la duración del torneo.